lunes, 28 de abril de 2014

Él es cómplice de mis sonrisas.

Cuando tienes esa mínima esperanza de que a lo largo del día te escriba cuatro palabras en un mensaje. Cuando tienes claro que es capaz de sacarte un sonrisa con cada una de sus miradas. Cuando necesitas saber de él, saber que esta bien, saber que se acuerda de ti. Cuando no dejas de pensar en lo bonito que puede llegar a ser si algún si tiene que serlo. Cuando quieres soñar con él para tenerlo cerca aunque sea por unos minutos. Cuando sabes que con una mirada basta para definir complicidad y confianza. Cuando te da vergüenza estar con él a solas porque sabes que tu ojos brillan mientras que tu sonrisa no es capaz dejar de lucirse. Cuando buscas cualquier excusa para verle o hablar con el, o cuando dejas de lado cualquier rutina diaria para poder cruzar cuatro miradas y sacar esa sonrisa como él solo saber hacerlo. Cuando darías lo que fuera por que un día entre películas y palomitas sus manos se entrelazarán con las tuyas bajo la manta. Cuando quieres que sea parte de tus arrugas y manías, de tu día y de tu noche.

domingo, 20 de abril de 2014

Cuando piensas en alguien lo suficiente como para empezar a plantearte si en el fondo para ti es tan sólo una simple amistad. Cuando lo primero que recuerdas en momentos de aburrimiento es su mirada. Cuando escribes textos como estos pensando en que ahora mismo estarías mejor si estuviera a tu lado. Cuando deja de ser uno mas y empieza a ser el.